4 preguntas para empezar a emprender

Para emprender hay que empezar por esto

Toda la vida deseando ser mi propia jefa y cuando al fin lo consigo, me someto a mis propios juicios y valores. Me veo atrapada por un horario que yo misma he diseñado, tomando decisiones que no están alineadas con mis deseos y trabajando en proyectos que no alimentan mis objetivos. ¿Te suena? 
Así encuentro muchas veces a las emprendedoras con las que trabajo. Persiguiendo sus sueños de emprendedora con una mentalidad (aún) de trabajadora. Y yo misma me siento así muchas veces, buscando la validación de otras personas cuando tomo decisiones inusuales en mi negocio que van alineadas con mi manera de ver, sentir y hacer…pero que no son quizá muy populares.

Por eso, en este artículo me gustaría plantearte un ejercicio muy simple; diseña el tipo de negocio que quieres.

Emprender es tomar decisiones

Ejercicio para empezar a emprender

Como emprendedora has de decidir cómo quieres que sea tu negocio, tu horario, tu manera de comunicar y de tomar decisiones. Repito, tu manera. No la que se supone que debes hacer, no la que pone en los libros de emprendimiento, no la que solías hacer cuando eras emprendedora.

Vamos a diseñar tu negocio en base a cuatro preguntas.

1. ¿Cómo me imagino de aquí a un año en mi emprendimiento?

2. ¿Cuál es mi horario ideal o cuántas horas quiero trabajar?

3. ¿En qué disfruto más trabajando?

4. ¿Cuánto dinero quiero ganar y cuántos clientes quiero tener?

Estas cuatro preguntas no son nada sencillas de contestar, por lo que te recomiendo que te tomes un tiempo para contestarlas. Agarra un cuaderno, de hecho, elige un cuaderno donde vayas contándote a ti misma, día a día, cómo quieres que sea tu negocio. Y en ese cuaderno, empieza por plantearte las 4 preguntas.

Pregunta 1: ¿Cómo me imagino de aquí a un año en mi emprendimiento?

Quizá esta sea una de las preguntas más difíciles de contestar, porque requiere de desmontar nuestras creencias limitantes y miedos y soñar a lo grande. Como se dice comunmente en el espacio de crecimiento empresarial; enfócate durante seis meses, a lo bestia, en tu idea de negocio. Dalo todo, profundiza, enfócate como nunca antes, y como resultado obtendrás un negocio que puede cambiarte la vida. Si seis meses son suficientes para un cambio exponencial en tu carrera profesional, imagínate en un año.

Eso sí, este pequeño ejercicio requiere de que tomes la primera decisión; elegir cómo quiero que sea mi emprendimiento.

Debes escribir cómo es un día ideal en tu vida de emprendedora, a qué hora te despiertas, cómo es tu rutina, dónde estás o desde dónde trabajas. En qué estás trabajando. Cómo te sientes, física y mentalmente. Etc.

Este ejercicio, en apariencia tan sencillo, te ayudará a tomar la decisión de cómo quieres que sea tu emprendimiento, Y es así cómo podrás empezar a planificar teniendo en cuenta estos objetivos.

Hazlo divertido, no te cortes. Si tú realmente quieres trabajar desde Bali tomando zumos verdes, atrévete a soñarlo.

Pregunta 2: ¿Cuál es mi horario ideal o cuántas horas quiero trabajar?

La última vez que hice esta pregunta en mi grupo de mentoría, en la que acompaño a 17 mujeres en diferentes estadios de su emprendimiento, a alguna le entraba la risa cuando se atrevía a expresar en alto que quería trabajar menos horas. Da como vergüenza reconocer que queremos trabajar menos, cobrando igual o incluso más. Al menos a mí me ha pasado en alguna ocasión. Mi manera “anclada” de trabajar, en un mundo de esquemas clásicos de trabajo, me lleva a sentirme mal o a juzgarme a mi misma cuando me reconozco o expreso en alto que realmente lo que quiero es trabajar poco y cobrar muy bien. ¿Una quimera? No lo creo, pero requiere de estrategia y foco.

Asi que detalla cuántas horas quieres trabajar y cuál quieres que sea tu horario. Si no quieres empezar a trabajar hasta mediodía porque es entonces cuando te sientes más enfocada, abraza esa idea y pruébala. Testéala. Y parece sencillo, pero no lo es. 

Yo llevo unos meses trabajando en mi horario ideal y me cuesta defenderlo delante de otras personas, pese a haberme demostrado a mí misma que me funciona y que me ayuda a trabajar mejor. Pero cuando digo a mi alrededor que trabajo unas 4 horas al día, y siempre después de haber ido al gimnasio o al spa donde a veces voy, me siento mal. Estoy trabajando en ello por supuesto, pero es inevitable, delante de gente acostumbrada a cumplir un horario estricto, sentirme, yo misma juzgada. 

Por eso es importante analizar si el horario que tienes ahora mismo te lo has puesto tú, o te lo ha impuesto la cultura y sociedad de la que formas parte.

Una vez te atreves a decidir el horario que quieres tener, es cuando realmente puedes empezar a tomar decisiones sobre cómo quieres trabajar.

Pregunta 3: ¿En qué disfruto más trabajando?

Hay partes de nuestro negocio que realmente no disfrutamos. Y sí, muchas veces debemos hacerlas y, sobre todo al principio, es difícil delegar absolutamente todo. Primero, bajo mi experiencia, debemos pasar por ello para saber delegarlo. Pero necesitamos profundizar en esta pregunta una y otra vez. ¿En qué disfruto más trabajando como emprendedora? 

Es muy legítimo que te guste tu trabajo pero no te guste tratar con mucha gente, o que te encante comunicar pero te cueste hacer las cuentas, o que no te guste nada llevar el marketing de tu negocio pero te encante escribir sobre el tema. Todo está bien, tú eres tu propia jefa. Para eso te lanzaste a emprender, para disfrutar.

Si solo te pudieses dedicar a un aspecto de tu negocio y todo lo demás funcionase como por arte de magia, ¿qué sería? Ahí puede que encuentres la respuesta.

Otro aspecto que no todos los gurús de la productividad tienen en cuenta es la influencia de nuestro ciclo menstrual en nuestra manera de trabajar. Puede ser que haya momentos de tu ciclo en los que te apetezca más escrib ir, otros en los que te apetezca mucho conectar con posibles clientas y otros momentos en los que solo quieras encerrarte en el despacho y leer, analizar o escribir. Todo está bien, tienes el derecho a cambiar.

Pregunta 4: ¿Cuánto dinero quiero ganar y cuántos clientes quiero tener?

La pregunta más jugosa e inevitable. ¿Cuánto quiero ganar? No lo pienses tanto, dí esa cifra que tienes siempre en mente. ¿Quieres ganar 5000€ al mes? Fenomenal, entonces tienes que decidir cuántos clientes vas a tener para alcanzar esta cifra. Por esto es importante tener claro antes cómo quieres trabajar, cuál quieres que sea tu horario y qué es lo que mejor se te da. Porque en base a todo eso, podrás hacer una planificación adecuada de productos, precios y costes.

Hay gente que le encanta tener muchos clientes y tiene mucha capacidad para mantener toda la energía que eso requiere. Hay otras personas, que prefieren tener que tratar con menos clientes. ¿Tú quién eres? 

No hay respuesta mala o buena, tal como el dinero es neutro y no es bueno ni malo, ni tienes que ganar igual que tus semejantes o obligatoriamente más que esa persona con la que te sientes en deuda. Tú decides qué cantidad quieres ganar. Y en base a eso, tomarás las decisiones adecuadas.

Espero que este ejercicio tan poderoso te ayude a ver con claridad qué tipo de negocio y de emprendedora quieres ser. Porque para mí uno de los retos más grandes como emprendedora y dueña de mi tiempo es tomar decisiones adecuadas y alineadas con mis objetivos, aunque a veces no sean muy populares o muy comunes.

Atrévete a contestarte con sinceridad a estas preguntas y decide hoy quién quieres ser.

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Gracias por leerme. Cuéntame qué te ha parecido este ejercicio en este email o en cualquiera de mis redes sociales.

Paloma